Todos alguna vez hemos escuchado de la UIS, una gran universidad que queda en nuestra hermosa ciudad de Bucaramanga. Su labor académica inicia el 1 de marzo de 1948, formando profesionales altamente capacitados en todos los programas que ofrece, a pesar de haber iniciado siendo una universidad enfocada en lo industrial y tecnológico, siendo un orgullo para la ciudad, y aprovechando que este año cumple 75 años de ser creada, es importante conocer su historia.
La historia del origen de la Universidad Industrial de Santander se remonta al 11 de agosto de 1944, cuando un grupo de visionarios liderados por el ingeniero Alejandro Galvis Galvis, alcalde de Bucaramanga en ese entonces, tuvo la idea de establecer una institución de educación superior centrada en el desarrollo industrial y tecnológico de la región. La visión de estos líderes fue crear una universidad que ofreciera una formación académica enfocada en la ingeniería y las ciencias, con el propósito de suplir las necesidades de profesionales capacitados en áreas técnicas y científicas que pudieran contribuir al desarrollo y la industrialización de Santander y Colombia en su conjunto. Con el apoyo del gobierno nacional y el decidido compromiso de la comunidad santandereana, se logró consolidar el proyecto, y así, el 1 de marzo de 1948, la Universidad Industrial de Santander mediante la ordenanza 83 del consejo de Santander empezó sus actividades académicas.
En sus inicios, la UIS tenía un enfoque exclusivo en carreras de ingeniería, ofreciendo estudios en ingeniería mecánica, ingeniería eléctrica e ingeniería química. En esa época, las instalaciones se encontraban ubicadas cerca del Instituto Técnico Superior “Dámaso Zapata”, precursor de las Unidades Tecnológicas de Santander. La creación de la universidad marcó un punto clave en el ámbito educativo y científico de la región. A lo largo de los años, la UIS experimentó un crecimiento constante, ampliando sus opciones profesionales y expandiendo sus instalaciones. En 1954, se crearon las carreras de ingeniería metalúrgica e ingeniería de petróleos, y la universidad se trasladó a las instalaciones que ocupa en la actualidad. Posteriormente, surgieron los programas de ingeniería industrial e ingeniería civil, consolidando el enfoque técnico y científico de la institución. Con el tiempo, la universidad diversificó su oferta académica. A mediados de los años 60, se crearon las facultades de ciencias de la salud y ciencias humanas, a través de la incorporación de la Universidad Femenina y sus programas de bacteriología, fisioterapia, trabajo social y nutrición y dietética. Estas se sumaron a las carreras ya existentes de medicina enfermería y laboratorio clínico, ampliando el rango de formación profesional ofrecido por la institución. En 1970, se estableció el programa de ingeniería de sistemas, el cual se convirtió en un pilar fundamental para brindar soporte tecnológico a la universidad y a nuestro territorio y en la década de los ochenta surgieron en la universidad opciones de carrera en geología, física, diseño industrial, música e historia.
En definitiva, la Universidad Industrial de Santander ha dejado un legado perdurable en la formación de profesionales altamente calificados en todos sus planes educativos y en la generación de conocimiento e innovación para el desarrollo de la sociedad. Su impacto se extiende mucho más allá de las fronteras de la región, consolidándose como un referente en la educación superior y siendo pieza fundamental para el avance científico en Colombia y América Latina, Celebremos sus 75 años.
