En Colombia la pandemia a impactado fuertemente en las clases más bajas, dejando a relucir todos los problemas que ya tenían desde antes en el país pero que ahora se hacen más fuertes y notorios que nunca, su vida es un sufrimiento e injusticia en sí que cada vez se hace más grande cubriendo a muchos más colombianos que antes.
Por lo que debemos enterarnos de qué consiste para poder hacer algo al respecto y salir de esa ignorancia que nos agobia a muchos. Durante los tiempos de pandemia hemos podido presenciar cómo las grandes corporaciones se ven en medio tanto de pérdidas como ganancias económicas y estamos al tanto de la situación que atraviesan muchas de ellas junto con la de toda esa minoría de personas influyentes. Pero poco es lo que se habla y se menciona en los medios sobre la clase baja y la media quienes de hecho han sido los más afectados en toda esta crisis. Por lo que hay que concientizarse respecto al tema y saber sobre todos aquellos que deben tratar de escoger si se mueren de hambre o enfermos ya que son personas que ni tienen ingresos estables ni un acceso a salud de calidad.
En Colombia las brechas sociales, el empobrecimiento, y las deudas ya eran problemas que existían pero ahora con la pandemia estas no han hecho más que empeorar. En un principio cabe hablar de cómo la pobreza en Colombia ha incrementado de forma
bastante preocupante siendo así que en el 2019 la clase media la conformaba un 30,79% de la población, la clase vulnerable el 39,79% y la pobre un 27% mientras que en el 2020 podemos presenciar un cambio considerable, obteniendo ahora un 26,42% en
la clase media, la clase vulnerable a 34,78% y finalmente la clase pobre incremento al 36,4% de la población. Esto quiere decir que ahora 44 millones de personas han caído a la pobreza y 52 millones de personas dejaron de pertenecer a la clase media y volvieron a la clase baja en términos económicos, son muchas más las personas que deben vivir con menos de un ingreso per cápita de $331.688. Pero mientras esto ocurre la clase alta se mantiene en 2,4%, tan solo dando más justificación para creer que en Colombia los ricos se vuelven más ricos y los pobres más pobres.
Ya hablamos sobre los datos a partir de cifras pero es momento de analizar que en realidad actualmente hasta los de clase media la están pasando mal, siendo así que si antes 7 millones de hogares que consumían tres comidas o más al día, el 77,4 % pudo seguir haciéndolo, mientras que el 22,7 % restante disminuyó el consumo: 21,1% pasó a tomar dos comidas y 1,6 % pasó a consumir solo una o menos. Así que se podría decir que de hecho los únicos que logran sobrevivir a la pandemia de forma digna son los de clase alta ya que justo ahora la clase media también se encuentra en aprietos, lo que nos lleva a cuestionarnos qué será de toda esta población si las cosas no toman un cambio drástico. El país estará aun mas lleno de personas que deben hacer
sacrificios día a día, sin ningún trabajo formal ni alguna fuente de ingresos, la pobreza y la agonía de todos aumenta con el paso del tiempo pero mientras eso ocurre la clase alta se quedará igual que como ha venido siendo, intacta, egoísta y completamente ineficaz ante la situación de los de más abajo.
Un perfecto ejemplo de estas situaciones de desempleo, pobreza, y brechas sociales en Colombia podrían ser los vendedores ambulantes. Varios lugares de Colombia en todo momento siempre están atestados de vendedores ambulantes, lo que podría ser raro teniendo en cuenta el hecho de que estamos en pandemia y las medidas de bioseguridad implica que este tipo de aglomeraciones se eviten, por lo que cuando a la mayoría de la gente le hablan sobre esto piensan en lo irresponsable que son estas personas y que deberían quedarse en casa como el resto de nosotros. Pero de hecho ellos lo harían de tener alguna opción más sin embargo no se tiene en cuenta que actualmente el 48,7% de la población es decir 5 millones de Colombianos que luchan
día tras día para ganarse la vida y sobrevivir a punta de trabajo informal. Ellos se han implicado en una gran pérdida en sus ingresos a causa del COVID y a pesar de esto ni las autoridades territoriales y nacionales han hecho algo al respecto en busca de
ayuda, y como si esta falta de colaboración y empatía de parte de los que supuestamente velan por el pueblo, también suman una persecución policial que no permite que desarrollen sus intentos de llevar un sustento a casa porque están “invadiendo el espacio público”, lo cual es bastante irónico ya que si son eficaces a la ora de tomar “medidas” contra los que están invadiendo espacio público pero simplemente se esfuerzan por ignorar cualquier motivo que tenga esta gente para hacerlo, en lugar de intentar resolver o apaciguar esta precaria situación por la que pasan 5 millones de habitantes prefieren perseguirlos para castigarlos aún más como si no fuera ya bastante lo que tienen que pasar cada día. A continuación algunos testimonios de estos laborantes: “me siento lastimado, porque la señora alcaldesa nunca nos dio una oportunidad, solo lo atropella a uno como vendedor informal”. Alexander Fraile Patiño, vendedor ambulante de comidas rápidas, también indicó que “Hay funcionarios públicos de la Alcaldía de Santa Fe que dan la orden de retirarnos de la carrera Séptima y de acomodarnos en las esquinas”. Elkin,
vendedor ambulante en la 76 con 11 Bogotá, señaló que “esto es una profesión, así como todas, pero no tenemos oportunidades y las que nos ofrece la Alcaldía son muy mínimas. En la zona donde yo trabajo había mafias, que ya no existen, las cuales se aprovechaban de las personas que venían de otros lados del país”. En las anteriores citas podemos evidenciar la notable antipatía por parte de las autoridades que no han hecho más que hacer vista gorda hacia ellos, y que solo actúa cuando vio que el problema rebosaba y era irreparable cuando por la necesidad vital de lleva un plata la mesa 2 millones de Colombianos salieron a las calles de Bogotá, y por esto el gobierno no tuvo otra opción más que reactivar diversos sectores económicos a mediados de mayo porque ya no había forma de contener la tensión provocada por la parálisis de los microempresarios que imploraban ayuda para pagar sueldos e intentar salvar la mayoría de ese 90% de empleo que aportan al país.
Entonces, como ya sabemos son muchos los habitantes de este país que se ven obligados a exponer tanto su salud como la de sus familiares con el fin de llevar comida a la mesa por lo que la relación que esto tiene con la salud es bastante grande, ya que son muy propensos a enfermar tanto del virus como de alguna otra enfermedad, y este es otro de los derechos en los que Colombia también falla. Por más de que la mayoría de la población pertenezca a clase vulnerable y baja estos son los que menos acuden a control médico, tanto como por falta de dinero como por los largos tiempos de espera, trámites engorrosos o desinterés. “La desigualdad en el ingreso produce diferencias en la calidad de vida de las personas y afecta el acceso a la salud. Si se es pobre y además se tiene bajo nivel educativo, se tendrán menores ingresos y mayores riesgos para subsistir”, explica el investigador Plazas. Con esto quiere decir que el sistema de salud en Colombia no hace más que dejar en evidencia la gran desigualdad que tienen las clases sociales, el principal motivo por el que esta gente no acude al médico es por el costo de la consulta, y esto no se va a solucionar mientras las autoridades no tomen acciones sobre la falta de ingresos y el empobrecimiento de la población.
En conclusión, en este país las cosas cada vez van peores, las oportunidades de la ente para conseguir empleos formales, sueldos decentes y una buena calidad de vida son menores al pasar los días. Y uno de los problemas más importante es que las personas que son realmente influyentes y que tienen la capacidad de producir un verdadero cambio prefieren no hacer nada por los demás y en vez de eso siguen ayudándose entre sí para que los de clase alta continúen en la punta de la pirámide, apacibles y totalmente intactos respecto a la situación que vive el resto de la población, lo cual es bastante irónico porque por más de que la mayoría de los Colombianos pasan por esto día tras día los medios simplemente censuran e ignoran esto causando que no todos sean realmente conscientes de lo que está pasando en el país y sobre todas las consecuencias que ha tenido la pandemia para los que sintieron el impacto más grande.
BIBLIOGRAFÍA:
https://www.wradio.com.co/noticias/economia/cual-es-la-solucion-para-los-vendedore
s-ambulantes-durante-la-pandemia/20210201/nota/4106136.aspx
https://news.un.org/es/story/2019/10/1463292
https://agenciadenoticias.unal.edu.co/detalle/article/estratos-bajos-los-mas-limitados-para-acceder-a-la-salud.htm