En Colombia, hay mucha diversidad en la cultura, costumbres y en la gastronomía, ya que no es lo mismo un ajiaco santafereño a un mute santandereano. Pero en este país en todo lado se consume arepa. Claro que es diferente una arepa boyacense a una antioqueña.
En este texto voy a narrar sobre la arepa de maíz amarillo originaria de Santander.
Esta arepa es una comida santandereana, que sirve de acompañamiento en los platos típicos de Santander..
El ingrediente principal de esta arepa es el maíz amarillo, tal como su nombre lo indica. Esta arepa se prepara todo el año ya que el maíz amarillo no es escaso ya que no hay estaciones que hagan que la cosecha se acabe. Además, en Santander se cultiva desde mucho antes de la llegada de los españoles, por esto la arepa es una comida típica, esto quiere decir que la preparaban los Guanes, indígenas de la región.
Cuando llegaron los españoles, probaron esta arepa, , le agregaron chicharrón; como mandaban, podían cambiar las tradiciones de los nativos.
Ya sabiendo sus ingredientes y un poco de su historia, ahora voy a empezar a narrar la preparación. Se desgrana la mazorca, luego se muele y, de este proceso se obtiene la harina; seguidamente se le agrega el chicharrón, se amasa y se lleva al horno. Tan pronto está cocida, hay muchas opciones de consumo, por ejemplo, en el desayuno con un caldo; en el almuerzo con carne oreada, pepitoria, mute, etc. Dicho esto, se puede concluir que esta arepa se puede consumir a cualquier hora y con una extensa variedad de platos.
Yo conocí esta arepa cuando me vine a vivir a Floridablanca. Como en ese entonces tenía apenas 7 años, pensaba que sólo había un tipo de arepa, que era la boyacense, porque esa es la arepa que más se consume de donde soy, Bogotá.
Recuerdo que la primera vez que vi esta arepa, me pareció extraño el color y el tamaño, ya que esta no tenía nada en común con la boyacense, pero de todas formas me gustó, porque esta arepa no se encuentra en ningún otro lugar.
Teniendo en cuenta lo anterior, puedo concluir que es importante conocer sobre nuestra gastronomía y tradiciones porque nos ayuda a tener un conocimiento más amplio del país. Sabiendo esto, es deber conservar estas tradiciones, para que no se pierda la cultura y saberes ancestrales de nuestra región.
