La ciudad de Bucaramanga, también conocida como la ciudad bonita de Colombia, está ubicada al nororiente del país en la cordillera oriental, es la capital del departamento de Santander. El presente artículo busca informarle, explicarle y generarle curiosidad al lector de indagar y profundizar su conocimiento sobre la que posiblemente es la ciudad en la que habita. En este texto exploraremos los acontecimientos más destacados de su fundación, primeros años y algunas generalidades que ciertamente han hecho de esta ciudad un lugar único y especial.
Su fundación data del 22 de diciembre de 1622 cuando el presbítero Miguel Trujillo y el capitán español Andrés Páez de Sotomayor evidenciaron la necesidad de evangelizar a los asentamientos indígenas de estos territorios y obtener el control de las minas de oro, por estas razones levantaron un acta de construcción de una iglesia y sacristía, la cual fue nombrada como “Real de minas”, donde luego repartieron los resguardos entre los indígenas de las distintas encomiendas con límites similares a los que actualmente se han fijado en el área metropolitana. La mala interpretación de estos sucesos causó disputa académica durante años sobre el origen fundacional de la ciudad. En términos legales, la ciudad nunca fue fundada, se congregó el pueblo de indios en 1622 y en 1778 se denominó parroquia. La ciudad fue receptora de una gran corriente de migración alemana en el siglo XVII, esto favoreció su desarrollo. A finales de este siglo los pobladores dieron su grito de independencia, ya que la tiranía, la alta carga tributaria y el hurto de tesoros generaron un gran descontento social. En 1810 se le otorga provisionalmente a la ciudad el título de villa y posteriormente en 1869 Bucaramanga adquirió el título de ciudad bajo la firma del presidente Manuel Murillo Toro; debido a su rápido desarrollo económico y social se consolidó como epicentro poblacional y urbano, lo cual también fue motivado por su designación como capital de Santander en 1886.
Por otra parte, en la actualidad podemos encontrar festividades como la semana nacional del tiple, el festival internacional de piano de Santander y el festival musical “La hormiga de oro”, a su vez, Bucaramanga destaca por contar con una gastronomía diversa en la cual se pueden degustar platos como la pepitoria, el cabrito y las hormigas culonas; hablando en un tono más académico esta ciudad cuenta con instituciones de alta calidad como la UNAB y la UIS, esta última fue partícipe de la creación de la “Red Andina de universidades” propuesta por el parlamento Andino. En la actualidad la plaza García Rovira (actual parque García Rovira) se establece como centro de poder, y esta junto con el parque Romero se convirtieron en el primero núcleo de la ciudad que provocó un crecimiento urbano. Finalmente, es importante recalcar y reconocer a los bumangueses por su espíritu emprendedor y su constante búsqueda de progreso, lo cual ha generado el surgimiento de “start-ups” y empresas como, por ejemplo, Freskaleche, Marval y Campollo.
En conclusión, Bucaramanga con cuatrocientos años de existencia, ha evolucionado hasta convertirse en un epicentro cultura y en la quinta ciudad más importante de Colombia. Su nacimiento dio origen a una ciudad rica en tradiciones y con personas emprendedoras y “echadas pa´delante”, esto junto a su desarrollo la ha convertido en un lugar vivo, completo y muy seguramente especial para la mayoría de lectores.
